Sin categoría

Café… y que no surja nada más.

Mis apetencias sociales no se han quedado en los cyber mundos.

Quien me iba a decir a mí, hace un año que ahora estaría volviendo a juntarme con gente para tomar algo, charlar, conocer. Y que lo haría con tanta frecuencia. (Y menos de lo que me gustaría porque muchas cosas me pillan demasiado lejos).

Es cierto que a lo largo de mi andadura he pasado por varias etapas, algunas muy sociales y otras de no querer saber nada. Siempre he tenido la suerte de contar con buenos amigos con los que juntarme para charlar, sin la necesidad pasar por el resto de cosas que implica socializar.

Que sí, que es algo necesario y que viene muy bien para conocer gente, pero al final, por mucho que pase el tiempo, ciertas actitudes se repiten y cansa.

Por suerte el balance es positivo, al menos hasta ahora, en todos los encuentros he llegado a pasármelo más o menos bien, que es de lo que se trata.

Reencontrarse con gente de la que hacía tiempo no sabías es algo curioso, porque al final, aunque pasen años, hay conexiones que siguen ahí y las charlas que no se han dado, estaban esperando para producirse.

Reconozco que hay encuentros, que sí que deseo con ganas. En breve haré un viaje y, aunque el motivo de este es uno concreto y que no puede hacerme más ilusión, se ha improvisado algo que me apetece muchísimo.

No solo por la parte de relacionarme, sino porque será una primera vez que me causa cierta intriga y de la que sé que voy a disfrutar mucho.

Todo tiene momentos. Después de una larga temporada, muy apática (ya antes de mi retirada) ahora toca una, que aunque no sé cuánto durará, pienso disfrutar desde la tranquilidad de que el único interés es conocer y compartir.

Al final, pudiendo entender quien lo hace así, opino que quedar solo con intenciones de poder llegar a algo más, nos limita demasiado. Muchas veces se crean altas expectativas, motivadas por el morbo, y nos perdemos una buena cantidad de matices y oportunidades en algo tan sencillo como compartir tiempo y charlar.

También sé que, probablemente, pueda decir esto desde una postura privilegiada en la que no tengo necesidad de buscar o encontrar nada… Pero a lo largo de tantos años, sola o con compañía, mi motivación para socializar siempre ha sido la misma.

Y no creo que cambie a estas alturas…

Una respuesta a “Café… y que no surja nada más.

  1. Conocer personas con intereses y gustos compartidos o complementarios nunca está de más. Un café, una charla con un buen vino, suelen ser momentos en los que se puede pasar ratos agradables. Luego las cosas irán por donde las personas deseen.

    Me gusta

Deja un comentario